Parecía el primer día de clases. Los jugadores tenían la camiseta gris de entrenamientos dentro de la pantaloneta del mismo color. Lucían peinados, algunos con mochilas y zapatos nuevos. Otros, como el arquero Damián Lanza, estuvieron, incluso, acompañados por familiares.
Así empezó ayer Barcelona su pretemporada en el estadio Monumental. Antes del entrenamiento, el presidente Antonio Noboa y el estratega Luis Zubeldía reunieron a los 23 jugadores, dos de ellos juveniles, en el centro de la cancha. El directivo les dio la bienvenida. Su plática con la plantilla duró 15 minutos. Ahí les dijo que el objetivo de la temporada es “luchar por clasificar a la final del Campeonato y a la Copa Sudamericana en el primer semestre”.
Zubeldía también habló. Les dio la bienvenida a Frickson Erazo, Narciso Mina, Michael Jackson Quiñónez, José Ayoví y Damián Lanza, los nuevos refuerzos del equipo. Les dijo que ninguno tenía la titularidad asegurada y que a partir de ese momento (ayer) empezaría a observar a los mejores elementos para conformar el equipo titular.
Los canarios alternaron en su primer día de entrenamientos trabajos físicos y tácticos. Lo hicieron por dos horas. En la primera etapa de la práctica, realizaron ejercicios de capacidad aeróbica en una distancia de 600 metros con pausas. En la segunda, ejecutaron trabajos tácticos con balón. Según el argentino Pablo Sánchez, preparador físico del equipo, la carga de trabajos se intensificará a medida que se acerque el inicio del Campeonato Nacional, el 5 de febrero próximo.
Primer entrenamiento de refuerzos
El preparador físico argentino Pablo Sánchez, que hizo una evaluación del plantel, tuvo a su cargo la mayor parte del trabajo, desarrollado entre un ambiente cálido, lo hizo sentirse como en casa al zaguero central Erazo, quien proviene de las filas de El Nacional. “Estoy ilusionado por haber llegado a Barcelona. Ahora lo que queda es trabajar para conseguir el objetivo que es el título”, señaló el defensa, al término de la práctica torera.
El futbolista de 23 años dijo que quedó “sorprendido” por “la acogida que tuve del resto de jugadores. Hay un gran compañerismo”. El esmeraldeño aseguró que “no llegué a Barcelona a especular, vine a dejar todo por el club y tratar de que a fines de año podamos darnos un abrazo luego de salir campeones”.
Mientras, el delantero José Ayoví, que arribó del Independiente por recomendación del goleador Mina, expresó: “Me siento contento” por iniciar esta etapa con los amarillos, y aclaró que su deseo siempre fue jugar en el cuadro canario. “Tenía propuestas del exterior y de otros equipos de Ecuador, pero desde muy chico me involucré en el mundo de Barcelona y por eso estoy contento de estar aquí”, refirió el atacante esmeraldeño de 21 años.
Los toreros viajarán la próxima semana a Quito y se entrenarán en la Casa de la Selección. “Pretendemos que los jugadores adquieran una memoria fisiológica para que cuando les toque jugar en la altura puedan hacerlo sin problemas”, explicó el asistente de Zubeldía.
Fuente: El Universo, El Comercio
No hay comentarios.:
Publicar un comentario