Frickson Erazo aseguró que no fue falta el penal que el árbitro Diego Lara pitó sobre Cristian Cordero dentro del área y que casi provoca la derrota de Barcelona ante Liga de Loja, de no ser por la milagrosa ataja del portero Máximo Banguera a casi 10 minutos para el final del partido.
El zaguero central recordó que esa jugada fue muy similar a la pena máxima que cometió en diciembre del año pasado a Fabio Renato, frente al mismo rival pero con la camiseta de El Nacional. “Son jugadas que uno no se da cuenta, pero en las repeticiones de los videos uno ve los errores que comete. Esa vez hablé con el árbitro que pitó en Quito y me dijo que si era penal, la jugada del domingo en Guayaquil fue muy similar, pero para mí no fue falta”, dijo.
En diálogo con radio La Deportiva, Erazo explicó que “a veces confío mucho en mi velocidad y potencia para llegar al balón, con Fabio Renato acepto que fue penal porque no llegué a tiempo, sin embargo en la jugada con Cordero yo punteé primero la pelota y al ver que no llegaba él se tiró y alcanzó a rosarla después. Incluso hice la retroalimentación de la jugada, para mí no fue penal porque toqué primero la pelota, hubiera sido una irresponsabilidad hacer una falta dentro del área a esas alturas del partido y con el marcador en cero”.
“No me gusta hablar de los árbitros, en el acierto y el error ellos son la autoridad y hay que respetar eso. No voy a decir que me quedé tranquilo cuando pitó la falta, si me enojó, pero lo importante es que Banguera pudo atajar el penal. Tengo mi conciencia tranquila, porque a mi parecer no fue falta”, manifestó.
A criterio de Erazo “tuvimos controlado todo el partido excepto el penal, que fue un descuido en una pelota larga que salí a cuidar la espalda de Jayro. Pero al margen de esa jugada la defensa no tuvo ninguna complicación en todo el cotejo, los delanteros de Loja quedaron neutralizados esperando un error en la línea de fondo para contragolpear”.
Erazo espera cumplir una buena actuación en el amistoso de esta noche entre Ecuador y Honduras, que servirá como preparación de la selección para la quinta jornada de las Eliminatorias Sudamericanas contra Argentina, a inicios de junio en calidad de visitante, palpitando desde ya su duelo personal con el astro Lionel Messi, al que calificó como su “pasaporte para Europa”.
“Marcar a Messi es mi pasaporte a Europa, esa clase de partidos los ve todo el mundo. Sería muy importante para mí tener ese roce de codearme con jugadores de talla mundial como Lionel Messi, Higuaín o el Kun Agüero. Esperemos estar a la altura, confío muchísimo en Dios y en mis condiciones, sólo espero llegar bien para esa ocasión”, señaló.
Reveló que no le interesa la camiseta de la pulga, que será rifada entre los jugadores de la selección de Suiza tras su amistoso de hoy con la Albiceleste, y provocó una riña entre dos defensas del Bayer Leverkusen que se la pelaron al final del cotejo frente al FC Barcelona en la Champions League. “Eso es lo que Messi provoca por todo lo que ha conseguido, pero a mí no me gusta pedir camisetas, solamente me gusta jugar los partidos y vivirlos al máximo. No por egocentrismo ni nada por el estilo, pero no me gusta pedir camisetas al equipo rival”.
“La selección siempre te da ese plus adicional, ser un jugador de selección no te compromete solo con la hinchada de un club, sino con todo un país. Al margen de que el partido con Honduras sea amistoso siempre se juega algo más, como la confianza del grupo y la credibilidad de los jugadores. Sería importante ganar para llegar con confianza contra Argentina, todos sabemos lo que representa esa selección a nivel mundial. Sería bueno que no vayamos allá con la expectativa de llevarnos un punto, sino ir convencidos de que podemos ganarle a una potencia futbolística”, expresó el esmeraldeño de 23 años.
Para culminar Erazo reiteró que le ha hecho muy bien ser compañero de Campos en el ídolo para mejorar como dupla defensiva. “Hemos mejorado muchísimo, porque en la selección teníamos máximo 5 días para trabajar juntos, pero ahora en Barcelona trabajamos juntos todos los días. Es importante para mí, Jairo, la selección y Barcelona que nos sepamos los movimientos de cada uno y que de a poco ambos vayamos adquiriendo confianza mutua”.
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