Prensa: “Zubeldía debutó con empate” |
Diarios afirman que empate de último minuto arrebató alegría al ídolo en Santo Domingo. El Telégrafo: “Barcelona se dejó empatar en los adicionales” El príncipe se estrenó en el “reino” Barcelona en un feudo lejano a su terreno original: Santo Domingo de los Tsáchilas. Los toreros igualaron 2-2 a Espoli en el inicio de la segunda etapa del torneo local. La propuesta fue de los amarillos en los primeros minutos. Zubeldía ordenó a sus jugadores con un planteo ofensivo, con Armando Wila, Pablo Palacios y Vinicio Angulo en el ataque, mientras que Matías Oyola era el creador del equipo. Además de Zubeldía, también debutaron el juvenil Roosevelt Oyola y por Espoli el golero uruguayo Diego Martínez. La ofensiva canaria empezó a funcionar y en los primeros minutos se acercó con un remate de Angulo, que se fue desviado al tiro de esquina. El DT argentino puso una rodilla a tierra para ver más cómodo el encuentro con los brazos cruzados. Barcelona de nuevo avisó, cuando Angulo superó con velocidad a Cristian Ojeda, habillitó a Wila y su remate de primera se fue cerca de Angulo. Sandro Vera llamó la atención a Zubeldía cuando el exLanús se resistió a entregar el balón a un rival, pero no pasó de ahí. Su semblante fue calmado y prácticamente ni se inmutó con las acciones del partido y pocas veces se dedicó a dar indicaciones. El dominio se diluyó para el lado de los visitantes y el dueño de casa empezó a mandar sobre el campo. El dominio se vio reflejado a los 32’, cuando Mellington Guerrero envió un centro al área, Banguera erró en su salida y Diego Lara aprovechó para empujarla y anotar la primera. Zubeldía ni se inmutó ni cambió su pose con el gol, ni cuando su equipo marcó el empate 5 minutos después. Luis Caicedo sacó un remate de media distancia y Martínez no pudo contener (37’). Lo fue a gritar cerca de la banca de suplentes y saludó con Zubeldía con la mano. Para el segundo tiempo, Penilla seguía con el mismo ritmo y velocidad del primer episodio. Tuvo en sus pies dos ocasiones. En la primera remató afuera y en la segunda amagó con un centro que fue directo al arco, que Banguera sacó con una mano. Zubeldía decidió hacer tres cambios de primera, con el ingreso de Damián Díaz, Iván Borghello y Geovanny Nazareno para potenciar el ataque. Díaz enganchó a la hinchada con una bicicleta y se ganó los aplausos de inmediato. Angulo avisó antes de su gol con un remate que sacó Martínez en el mano a mano y luego, tras un pase preciso de Díaz, eludió al golero y marcó la segunda. Con este tanto, el príncipe se convirtió en un jugador más, se metió a la cancha y lo gritó efusivamente, para luego alzar los brazos hacia la hinchada. Pero, en los minutos adicionales, la alegría terminó cuando Carlos Quillupangui habilitó a Guarino para empatar el encuentro. El Universo: “Guarino evitó triunfo en debut de Zubeldía” Con gol de Javier Guarino en minutos extras, Espoli arrebató ayer la alegría a la multitudinaria hinchada de Barcelona presente en el estadio Olímpico, que debió conformarse con un empate a 2, en el debut oficial del DT Luis Zubeldía. La visita propuso el juego y con remates de Pablo Palacios (1m) y Armando Wila (5m), los toreros avisaron en la portería del uruguayo Diego Martínez. Con el apoyo de los laterales, Espoli llegó a la portería canaria y al minuto 24, Javier Guarino estuvo cerca de abrir el marcador a pase de Cristian Penilla, pero el cierre del golero Máximo Banguera lo evitó. Los toreros perdieron el control del mediocampo y llegó el gol policial. Mellington Guerrero ganó la banda derecha, centró, y ante falla de Banguera, Diego Lara puso el balón en las redes (32m), para el 1-0. Barcelona empató al minuto 37 y retomó el control del juego. Luis Caicedo ganó un balón en el mediocampo y sin marca remató desde 35 metros. Antes del descanso , Armando Wila pudo adelantar a los toreros, pero su remate obligó al golero Martínez a desviar el tiro. Con la reanudación del juego, los canarios buscaron desequilibrar, pero se encontraron con una defensa ordenada, que no permitió libertades al despliegue ofensivo de los canarios. El DT torero, Luis Zubeldía, refrescó sus líneas con el ingreso de Iván Borghello, Damián Díaz y Geovanny Nazareno, y ganó mejor volumen ofensivo. Un remate de Vinicio Angulo (68m), quien se mantuvo cerca del arco policial, dio aviso de la intención ofensiva de los canarios. Barcelona presionó más y a los 70m llegó el 2-1. Díaz colocó un pase abierto para Angulo, que con un disparo directo decretó la ventaja torera. En los minutos finales, Espoli buscó la igualdad y un remate de Mario Lastra (80m) exigió a Banguera, en inmejorable opción de gol para los dirigidos por Santiago Ostolaza. La hinchada torera festejaba el triunfo pero un descuido de la zaga visitante permitió filtrar un pase de Carlos Quillupangui a Guarino, que con remate rasante puso el 2-2 final (90+2m) y la desazón en la parcialidad canaria que fue mayoría absoluta en el estadio colorado. Expreso: “Zubeldía empezó con un empate de visita” Barcelona dejó escapar ayer el triunfo en el último suspiro del partido con Espoli. Cuando los ocho mil seguidores del Ídolo del Astillero festejaban en el estadio Olímpico de esta ciudad el buen inicio en la segunda etapa, apareció el uruguayo Javier Guarino para poner el empate. Luis Zubeldía, entrenador de Barcelona, siguiendo su vocación ofensiva como en su época de futbolista profesional, salió con tres delanteros con oficio: Pablo Palacios, Vinicio Angulo y Armando Wila. Él era atacante y se retiró a los 23 años por una grave lesión en una de sus rodillas. La propuesta del técnico argentino de 30 años se reflejó de entrada en la cancha: antes de los dos minutos de juego, Angulo ya puso en peligro el arco policial con remate de cabeza. Los seguidores del equipo porteño, quienes se tomaron el primer escenario deportivo de esta ciudad, comenzaron a ilusionarse con una goleada al peor equipo de la primera etapa. El juego aéreo se convertía en la mejor arma ofensiva de los visitantes. Matías Oyola buscó la cabeza del zaguero José Luis Perlaza, quien desde el corazón del área no tuvo la precisión en el envío. Zubeldía se contagió de la tensión del partido: se agachó y puso la rodilla en el piso. El equipo local se preocupaba más de la contención y solamente intentaba inquietar adelante con Javier Guarino. Sin embargo, el delantero uruguayo no supo aprovechar un desentendimiento de los centrales rivales y cuando estaba de frente al arco, remató sin convicción y permitió el lucimiento del golero Banguera. Barcelona se fue apagando después de la media hora. Matías Oyola ya no aparecía con claridad en la habilitación a sus compañeros de ofensiva. A los 32 minutos se registró la gran sorpresa para la numerosa hinchada de Barcelona: Diego Lara anotó para Espoli. Se quedó el arquero Banguera y los centrales Iván Hurtado y Perlaza. Los tres se dejaron ganar por arriba por el pequeño mediocampista policial. Zubeldía no podía creer y se quedó inmóvil cruzado de manos con la mirada perdida. Sin embargo, la preocupación de los toreros duró poco, ya que Caicedo puso, cinco minutos más tarde, la igualdad con disparo de media distancia. Pero, ni el gol cambió el serio semblante del estratega, quien volvió inclinarse con la rodilla en el suelo. Barcelona pudo irse al descanso en ventaja, pero Vinicio Angulo no contó con la capacidad para definir en el arco defendido por el debutante uruguayo Diego Martínez. Cuando el central Sandro Vera dio por finalizado el primer tiempo, los jugadores de Barcelona se reunieron en un costado de la cancha. El experimentado zaguero Iván Hurtado se dirigió a sus compañeros. El estratega Luis Zubeldía miraba un tanto sorprendido desde el borde del área técnica lo que sucedía con sus dirigidos. Cuando salieron les dio una tibia palmadita en la espalda. Pablo Palacios por hacer una demás, desperdició una clara ocasión de anotar para Barcelona recién iniciada la etapa complementaria. Luego de eso fue reemplazado por Iván Borghello. A renglón seguido entró su compatriota Damián Díaz, quien debutaba. La idea de Zubeldía era reforzar el juego de generación en el medio sector. |
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