El argentino Nicolás Olmedo conocía sobre la idolatría de Barcelona, pero dice que es mayor de lo que pensaba
Le dicen el negro, cascarudo o rucucu. Los últimos años Nicolás Olmedo todo lo había visto en azul y celeste, los colores del equipo Godoy Cruz, los que ha perdido de su vista durante estos días de entrenamiento con Barcelona y seguro que los volverá a ver cuando enfrente a Emelec o Macará.
El argentino es el nuevo volante de contención del ídolo. Olmedo es de hablar pausado, y contestar todo. Se lo nota tranquilo y sin poses. Sencillo al comunicarse, pero cuando se trata de frenar al rival, se transforma en un león. Estos días, a lo único que le ha costado adaptarse es a la alta temperatura de Machala.
Se ha metido de lleno al trabajo y dice que le habían contado de Barcelona y su idolatría, pero es mayor a lo que se esperaba. No ha jugado ni un solo partido y le han pedido en innumerables ocasiones fotos y autógrafos, no obstante, los pedidos de la afición son grandes: quieren la estrella 15 y el título de la Copa Libertadores.
ANTECEDENTE. El negro pudo ser uno de los integrantes de la estrella 14. Los hermanos Noboa desde el año anterior lo querían incorporar al ídolo, pero no se pudo lograr su fichaje. La historia estaba escrita para que Nicolás venga a buscar el campeonato 15.
"Era la segunda vez que me llamaba la dirigencia de Barcelona para que venga a jugar, eso tuvo más fuerza en los directivos de mi exequipo y dije que tenía que venir aportar para el campeón. Quería conocer lo que es esto, muchos me habían dicho de cómo es la afición que es la mayoría de la hinchada del país, y en estos días he vivido cosas muy lindas en el poco tiempo, solo ahora nos queda de aportar lo que sabemos en la cancha", expresa Olmedo, que jugará su segunda Copa Libertadores, torneo que lo tiene con más motivación.
"Uno viene a sumar al plantel y a demostrar lo que más puede y sabe", dice el mediocampista argentino, quien tiene sueños personales, pero los principales son los que se ha trazado en conjunto con Barcelona. "Siempre se tiene objetivos a nivel personal, pero el que tengo es a nivel grupal con mis nuevos compañeros, deseamos conseguir lo que nos proponemos como Barcelona, ellos comentan de lo que se vivió el mes pasado que fue una locura y uno quiere también vivir eso, la afición nos pide el campeonato y hay que trabajar mucho para lograrlo".
Olmedo se describe: me gusta tener un buen despliegue y mucha marca, pero lo que me pida el técnico lo voy hacer, tengo un juego simple de defender con todo y si puedo aportar en el ataque, manifiesta el jugador amarillo, que al pasar las horas de entrenamiento va sintiendo menos el tremendo calor de Machala.
Es el Olmedo de Barcelona, ese que tuvo que esperar un año para poder venir al plantel. Promete entrega y despliegue en la cancha, algo que siempre ha sido su característica. Tiene todas las ganas de mostrar sus condiciones, no ha jugado nada y ya sabe lo que es la hinchada del cuadro amarillo. "Solo queda entrenar para estar listo para el primer encuentro", dice con voz seria y comprometida. Ya se pueden imaginar lo que será cuando esté defendiendo al equipo.
FUENTE: Diario Expreso
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