domingo, 9 de marzo de 2014

¡AL DIABLO LARA!

¡AL DIABLO LARA!
El cuadro de Deportivo Quito le dio la vuelta al resultado y terminó venciendo 2-1 a Barcelona, con una polémica decisión del árbitro Diego Lara en la segunda anotación de los chullas.
El partido se jugó en el estadio Olímpico Atahualpa y fue válido por la octava jornada del campeonato nacional. Los chullas sometieron a Barcelona en los primeros 15 minutos del duelo; con centros proyectados desde las bandas, de Wasingthon España y Daniel Loor, le dieron problemas a la zaga rival.
A los 3, el Quito puso la primera advertencia en el partido, con un contragolpe que Víctor Estupiñán terminó concretando en gol, pero la jugada fue anulada porque el delantero estaba en posición adelantada.
El dominio de los quiteños era abrumador, pero la falta de definición de sus delanteros conspiró en su contra; ante esto Christian Lara y Édison Vega buscaron sorprender con tiros de media distancia al portero Máximo Banguera, quien estuvo atento y bloqueó todos los remates.
Cuando el Quito estaba en su mejor momento, un contragolpe de Barcelona cambió el desarrollo del compromiso. Cristian Penilla recibió un pase por la derecha y éste logró habilitar a Matías Oyola, quien definió sin problemas (m17).
La anotación motivó a los toreros que buscaron conseguir la segunda, ante un Quito que perdió la agresividad que había mostrado en el inicio; mientras que los últimos del primer tiempo, el juego tornó cortado por las constantes faltas de los jugadores de ambos equipos.
Cuando se jugaban 60 minutos, el estratega Carlos Ischia buscó asegurar el triunfo. Barcelona se imponía 1-0 con gol de Matías Oyola y el elenco guayaquileño manejaba las acciones.
Se dio el cambio de Stalin Motta, quien fue reemplazado por Flavio Caicedo, para afirmar la marca. Con esto, Federico Laurito y Christian Penilla se quedaron sin habilitador. Luis Fernando Saritama estaba más tirado a la banda derecha y se tuvo que correr al centro para cumplir como enganche.
Pero su estrategia se cayó solo 5 minutos después, cuando llegó el empate, por intermedio de Víctor Estupiñán. Tras el tanto, cuando Ischia se disponía a realizar el cambio de Michael Jackson Quiñónez, fue expulsado Jason Domínguez.
Con esto se trastocaron los planes del DT y tuvo que realizar dos variantes. Quiñónez ingresó, pero en lugar de Saritama y Alexander Pinillo entró por Laurito. Sin un atacante en punta definido (Penilla corre por las bandas) y un jugador menos en cancha, los toreros cedieron espacio. 
El Quito cogió el control del partido y ocasionó varias opción de gol. Los avances por las bandas, con Christian Lara por izquierda y Édison Vega por derecha causaban daño el elenco visitante.
El más dinámico en los tres cuartos de cancha de los chullas era Lara. Justamente el diablito marcó el tanto del triunfo. Un tiro del delantero, que no ingresó al arco, fue dictaminado como gol legítimo por el central Marco Musso.
Tras el gol fantasma, los jugadores de Barcelona reclamaron, pero el árbitro no escuchó las quejas y dio el gol por válido. Se jugaban 83 minutos.
En las últimas jugadas de cotejo, hubo ocasiones de gol para ambos elencos, pero no hubo una definición acertada. Con este triunfo, el Quito suma 7 puntos y se ubica en el décimo puesto, mientras que Barcelona es octavo con 8 puntos.
Tomado de: El Telégrafo

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